Nuestra alumna Gaela Manzano, de Integración Social, nos regala su fantástico testimonio sobre las prácticas que ha realizado en un centro de segunda oportunidad de Francia.
Un oportunidad que ha sabido aprovechar, que le ha ayudado a crecer y a madurar en su vocación.
Podrás leer a continuación su testimonio y ver el vídeo que ha creado. Esperamos que lo disfrutes.
Las Escuelas de Segunda Oportunidad son estructuras que acogen a jóvenes de entre 18 y 25 años que han salido del sistema educativo y tienen un nivel de estudios básico (la ESO, titulación en FP Básica, e incluso una FP de Grado Medio en España). Es un dispositivo de entrada y salida constante, lo que quiere decir que se puede acoger a la persona en cualquier momento del año, y puede salir en cualquier momento, bien porque la persona en formación decide que no le conviene el servicio, o bien porque encuentra una salida positiva integrando una formación o un puesto de trabajo.
Una vez situado el contexto, me agrada adjuntar un video que muestra una presentación del ambiente de trabajo, para introducir más adelante un proyecto de desarrollo creativo, de autonomía y habilidades personales y profesionales; la “Exposición de Fotografía en el Centro Hospitalario Sainte Marie”. Las personas en prácticas debían reflejar mediante la fotografía y poemas (bajo el formato de Haiku) los espacios de libertad dentro de un centro hospitalario de atención psiquiátrica. Para ello tuvieron que planificar las acciones necesarias; selección edición de las imágenes, presupuestos para la impresión de las imágenes y los cuadros que se iban a necesitar… La exposición represento el contexto perfecto para firmar un convenio entre el centro hospitalario y la escuela, además de suponer un espacio que buscaba desmitificar prejuicios de la población en exclusión que acude a los dispositivos de inserción socio laboral, y de los espacios de atención psiquiátrica.
Durante mi estancia en la E2O de Le Puy en Velay, una escuela muy pequeña que debe depender de una estructura más grande (Greta du Velay, otra entidad que ofrece formación para adultas situadas en un rango de edad más amplio y con otras necesidades), he podido descubrir el ámbito de la inserción socio laboral basada en diferentes proyectos del carácter presentado previamente. Además me ha permitido descubrir todo un sistema sanitario, educativo y formativo, con el fin de comprender las equivalencias y quizá homologar mi título y volver a Francia en un futuro.
Las dificultades más claras de mi Erasmus han girado en torno al hecho de estar lejos de mi entorno y mi zona de confort, yo sola, lo cual imagino que representa un reto para cualquier persona que viaje al extranjero. Sin embargo, contaba con esta dificultad desde el principio, y lo convertí en uno de los motivos por los que quería irme. Necesitaba crecer conmigo misma y desarrollar la capacidad de desenvolverme y estar sola, conocer gente nueva y aprovechar para aprender. Evidentemente he tenido momentos de agobio y malestar, pero a nivel global me siento orgullosa de lo que he conseguido y de haber tenido la iniciativa de moverme para encontrar un equipo del deporte que practico, creado un espacio de equidad en un entorno asociativo, y asistido a diversos talleres formativos y creativos.
Es una experiencia enorme en mi vida y la recordaré como tres meses de crecimiento y aprendizaje. Creo que hay que saber enfrentarse a los retos que plantea la vida independiente en otra cultura, y aprender a ser su propio apoyo, así como buscar recursos en un entorno nuevo y desconocido. Te hace una persona más capaz, mejor formada, con mayor autonomía, capaz de desenvolverse y de adaptarse a situaciones desconocidas.
He aprendido muchísimo a nivel profesional, en el cuadro de mi formación como integradora social, pero creo que a nivel personal he debido enfrentarme a mí misma, sin posibilidad de refugiarme en mi entorno, familia… descubriendo así el trabajo personal que me queda por hacer, y aprendiendo a contar conmigo, conocerme e impulsarme a ser mejor.
Finalmente animo a cualquiera que tenga dudas a lanzarse; es un paso grande y un reto, te vas a enfrentar a muchas situaciones nuevas, tanto buenas como regulares, pero realmente merece la pena. Es una experiencia divertida, de crecimiento, enriquecedora y emocionante.
Gaela Manzano Le Maître